Porno con menores

A lo mejor has caído aquí por casualidad. O tal vez atraído por el jugoso título de este post. Si tan sólo eres un curioso te darás pronto cuenta de que cada vez somos más los que nos preocupamos porque la pornografía en Internet sea pronto un lamentable recuerdo, algo que acabe finalmente siendo controlado por las autoridades, las empresas responsables y los propios usuarios.

Si por el contrario has venido aquí atraído por el deseo de acceder a contenidos pornográficos con niños, solo me queda esperar que pronto acabes siendo atrapado en una de esas redadas que cada vez son más frecuentes y que terminarán con todos los pederastas en la cárcel, pudriéndote con tus repugnantes deseos.

Finalmente, si has recaído en esta casa porque has tenido la mala suerte de vivir una experiencia relacionada en primera persona con ese delito, solo puedo animarte a que denuncies, a que pidas ayuda. Se que es difícil, pero no imposible. Entre todos tenemos que parar ese cáncer.

Ayer, hoy, mañana y siempre… NO A LA PORNOGRAFIA INFANTIL EN INTERNET (Ni en nigún otro sitio)

5 comentarios

  • una gran iniciativa, que se toquen ellos y se pillen la mano con la puerta!!!, creo ademas que en la carcel no son de la gente a la que mejor se les trata, asi que no es para andarse con el bolo colgando, nunca mejor dicho… un saludo!!! buena iniciativa!!

  • Pingback: DeepMirrors Chanel «DeepMirrorsChanel

  • Gracias por comentar y por apoyar la iniciativa. Juntos podemos!!!!

    Abrazos

  • Querido Fernando:

    Si a la natural repugnancia nauseabunda que todo violador me inspira, se añade que esa intolerable agresión sea ejercida contra niños… ¡Imagina lo que siente un padre de tres hijas y abuelo de dos preciosas nenas!

    Me adhiero incondicionalmente, desde el conflicto intelectual de mi rechazo a la pena de muerte como venganza de Estado y lo que creo que sería capaz de hacer a uno de esos engendros inhumanos.

    Estoy contigo. Abrazos.

  • Me uno a tu voz, Fernando y coreo contigo un NO enorme, heavy y bestial a tan putrefacta práctica.
    Deseando, precisamente, putrefacción de ciertos órganos a sus prácticantes y/o aplaudidores.